En pocos días mas se dictará el ultimo módulo de esta Diplomatura que tiene sede en la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la UNNE, y que en principio, fue dirigida especialmente a arquitectos e ingenieros de la región. “Decimos inicialmente porque la demanda probablemente nos imponga abrir instancias para otras personas del medio”, dijo el Arq. José Inglant, reconocido especialista en esta temática y director de dicha diplomatura.
“Este año de experiencia piloto nos concentramos en compartir con nuestros colegas del medio todo lo aprendido en el Post título en Accesibilidad Universal en la Universidad internacional de Cataluña. Ello nos permitió enriquecer los saberes con el compartir comprometido de los colegas cursantes”, agregó.
El planteo del Programa, presentado oportunamente a la Facultad de Arquitectura incluye experiencias vividas de accesibilidad tanto física, como sensorial, cognitiva y visceral. Ello derriba, en primer lugar, la creencia extendida que los profesionales construimos un entorno accesible cuando colocamos (solamente) una rampa o hacemos un baño para personas con discapacidad.
Tomar conciencia que la accesibilidad universal no es una cuestión de “permitir” que las personas con discapacidad se “integren”, sino trabajar realmente por un modelo social, donde toda la comunidad tome conciencia que las barreras existen porque las creamos nosotros como comunidad. Ello deriva en la formación de la accesibilidad actitudinal, es decir, el momento en que cada ciudadano entiende que los espacios efectivamente, tienen que ser para TODOS. Ello implica pensar espacios urbanos y edilicios no solo para personas con discapacidad, sino efectivamente, incluir a mamás embarazadas o con carritos, a personas ancianas, entre otros.
“Priorizamos en el aprendizaje, además, una manera de sentir las dificultades que les imponemos a quienes hacen ya su esfuerzo para integrarse o vivir en una ciudad llena de barreras, no solo físicas, sino de toda clase. Casi con seguridad allí recién tomamos conciencia de la situación en la que ponemos a muchas personas”, señaló.
Los trabajos finales estarán orientados a realizar un aporte de un plan de Accesibilidad para organismos o espacios públicos, “aportando de esta manera nuestra capacidad de modificar de manera positiva los lugares que recorremos a diario”, descata.
“Creemos además que este enfoque en la formación es indispensable en estos tiempos, a los efectos de asegurar el cumplimiento de normativas internacionales, además de la Agenda 2030 a través de los ODS, y asegurar el acceso a derechos a las personas con discapacidad”, concluye Inglant.